Otilia
Hornear es muy divertido. Es bastante simple, puedes tomarte tu tiempo, llenar la casa con un aroma magnífico y comer algo sabroso al final.
Las galletas son un producto horneado muy popular y puede optar por hacerlas desde cero o usar una de las masas de galletas preparadas previamente disponibles. Pero créeme, una receta casera es mucho más gratificante (y saludable).
Batir la mantequilla, los azúcares y las sales básicamente significa simplemente mezclarlos. Es más fácil con un batidor eléctrico en un bol de metal o porcelana. Cuando la mantequilla está blanda y se mezcla con los demás ingredientes, adquiere una textura cremosa y rica.
Intente mezclarlo bien para que no queden grumos de mantequilla o azúcares agrupados. Tendrá una textura ligeramente granulada, pero por lo demás debería ser suave.
Recuerde tamizar la harina antes de agregarla también, ¡esto también mejora la textura!
¡Disfrutar!