Davonte
El cambio es una parte integral del mundo empresarial. Sin embargo, es posible que los empleados no siempre acepten el cambio. Lo primero que hay que recordar al lidiar con esto es pensar primero en las formas en que los objetivos de la empresa pueden alinearse con las necesidades, las necesidades de vida totales, de sus empleados.
Los empleados nunca aceptarán cambios diseñados para llenar los bolsillos de directores codiciosos y dar grandes dividendos a los accionistas. ¿Por qué deberían aceptar un cambio diseñado para beneficiar a personas más afortunadas y exitosas? Es por eso que muchos empleados no asimilarán fácilmente el cambio.
Nunca comprometa su integridad. Recuerde consultar a sus empleados y escuchar lo que tienen que decir. Hay algunas cosas que puede intentar para que sus empleados se adapten. En primer lugar, bríndeles una charla de ánimo: incorpore cuánto aprecia que se ajusten, qué tan bien han trabajado y haga todo lo posible para minimizar el grado de cambios que puedan tener que hacer. También tratan de aumentar sus sueldos para endulzar la amargura del cambio.