Leona
La fórmula química del agua es H2O. Esto significa que cada molécula está formada por un oxígeno y dos átomos de hidrógeno que están conectados por enlaces covalentes (que comparten pares de electrones). Por tanto, el agua contiene oxígeno e hidrógeno.
El agua cubre más del 70 por ciento de la superficie de la Tierra y se puede encontrar en sus estados sólido, gaseoso y de hielo, aunque en condiciones ambientales se encuentra en forma líquida. El agua se puede encontrar principalmente en grandes masas de agua y océanos, y solo el 0,001% se encuentra en el aire en forma de vapores, precipitaciones y nubes, y el 1,6% como acuíferos subterráneos. Solo un pequeño porcentaje del agua superficial del mundo se encuentra en productos manufacturados y cuerpos biológicos. Los océanos contienen el 97 por ciento, mientras que los casquetes polares y los glaciares contienen el 2,4 por ciento y el otro 0,6 por ciento se encuentra en colecciones de agua superficial como estanques, lagos y ríos.
Existe un intercambio constante de agua en la hidrosfera de la Tierra, que ocurre entre la atmósfera, el agua del suelo, el agua subterránea, el agua superficial y las plantas; el agua se mueve continuamente a través de procesos de transferencia. Estos procesos de transferencia son evaporación, precipitación y escorrentía. El agua se evapora de los grandes cuerpos de agua y océanos al aire, donde la condensación hace que el vapor de agua caiga a la tierra en forma de precipitación. Cualquier precipitación que no caiga directamente al océano se escurre gradualmente de la tierra hacia los cuerpos de agua donde su ciclo puede comenzar nuevamente.
El agua se utiliza en todos los aspectos de la vida humana, ya sea para beber con fines de supervivencia o para el lavado ritual en la religión, el agua juega un papel sin el cual los humanos no podrían vivir. El cuerpo puede contener entre un 55 y un 78 por ciento de agua y puede necesitar entre uno y siete litros de agua al día para evitar la deshidratación. Sin este compuesto químico de un oxígeno y dos átomos de hidrógeno, la mayoría de las especies del planeta no podrían sobrevivir.