Isai
El principal objetivo de la comunicación empresarial es influir, controlar las respuestas de nuestra audiencia de la manera que teníamos previsto, para que podamos cumplir ciertos objetivos para nosotros y nuestras organizaciones. La comunicación empresarial eficaz, por supuesto, da como resultado que obtengamos la respuesta que deseamos tanto a corto plazo, como hacer que nuestra audiencia obedezca una orden, como a largo plazo, como hacer que nuestra audiencia continúe siguiendo el espíritu de la política. Las metas secundarias como la autoexpresión, las relaciones sociales y el avance profesional también implican producir cambios en el conocimiento, la actitud o la acción. Con todas estas complicadas variables que ocurren en el proceso de comunicación, no es de extrañar que la comunicación sea imperfecta.
Como ejemplo empresarial de esto, imagine que todos en una empresa reciben una copia del informe anual. Un contador puede concentrarse solo en una nota a pie de página en el estado financiero; un vendedor puede mirar nada más que los gráficos de marketing; y un funcionario de relaciones públicas solo puede responder a la calidad del folleto en sí. Cada lector recibió los mismos datos; cada lector los percibió de manera diferente.
Por lo tanto, las comunicaciones tienden a influir de manera diferente debido a la percepción diferente de las personas que trabajan en la misma organización.