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La brecha inflacionaria es la diferencia entre el nivel de ingresos por encima del pleno empleo y ese nivel de ingresos en el pleno empleo. En otras palabras, la brecha inflacionaria está representada por la diferencia entre el ingreso nominal y el ingreso real cuando la economía opera más allá del nivel de pleno empleo.
La brecha inflacionaria se desarrolla cuando la economía comienza a operar más allá del nivel de pleno empleo y se amplía a medida que el nivel de funcionamiento de la economía aumenta más allá del nivel de pleno empleo. La brecha una vez creada da lugar a precios de tendencia inflacionaria. Se perturba el buen funcionamiento de la economía. Luego, el gobierno toma medidas correctivas para cubrir la brecha.
Cuando se crea una brecha inflacionaria, el ingreso real o el valor de la producción va por detrás del ingreso monetario. Esto sucede porque el tamaño de la producción del ingreso real permanece estacionario y no varía a medida que varía el ingreso nominal. En el nivel de pleno empleo, no quedan recursos ociosos para emplear para variar el nivel de producción. El ingreso monetario, por supuesto, aumenta en el sentido de que el mismo tamaño de producción alcanza un tamaño mayor de ingreso monetario debido al aumento en el proceso.