La psicología es una ciencia social, que se enfoca en comprender la mente humana y la forma en que interpreta e interactúa con el mundo. La asignatura tiene cuatro objetivos principales:
- Para describir
- Para explicar
- Predecir
- Para cambiar el comportamiento
Describir
Descripción es el proceso de analizar la conducta, en un intento por comprender qué se considera saludable y productivo, y qué rasgos de conducta son menos deseables.
Explicar la psicología no se considera una ciencia fundamental como la física o la química. Sin embargo, las tendencias emergentes en psicología durante los últimos 100 años han visto un énfasis creciente en el uso de medidas objetivas de la salud mental.
La psicología cognitiva es un gran ejemplo para ilustrar este cambio ideológico. Esta subdisciplina de la psicología utiliza técnicas como la medición de la actividad eléctrica del cerebro y el mapeo de estos patrones en los estados mentales de un paciente.
A través de este enfoque, los psicólogos están comenzando a establecer una base de evidencia objetiva para explicar los pensamientos y sentimientos de las personas. Al aprender a reconocer patrones saludables y no saludables, los psicólogos deberían poder detectar los problemas en los pacientes antes y brindar tratamientos más efectivos.
Para predecir
Una vez que los psicólogos han llegado a comprender ciertos comportamientos, pueden usar esta información para predecir el comportamiento de una persona, basándose en cómo han respondido a ciertos eventos en el pasado.
Esto es útil en entornos organizacionales donde un empleador puede querer elegir trabajadores que encajen bien con la cultura de la empresa, o para asegurarse de que puedan sobrellevar circunstancias estresantes.
Para cambiar el comportamiento
Ésta es el área en la que los psicólogos deben tener mucho cuidado de operar dentro de estrictas restricciones éticas. Con un participante dispuesto, un psicólogo puede ayudar a una persona a superar miedos paralizantes o patrones de comportamiento destructivos, como la agresión o la mentira compulsiva.
Se pueden emplear técnicas psicológicas dentro de las organizaciones para fomentar comportamientos deseables: alentar a los estudiantes a estudiar más o alentar a los miembros del personal a construir mejores relaciones entre ellos, por ejemplo.