Granville
El dinero como medio de intercambio entró por primera vez en la historia de la humanidad en forma de mercancías. Una gran variedad de artículos han servido de dinero en un momento u otro: ganado, aceite de oliva, cerveza o vino, cobre, hierro, oro, plata, anillos, diamantes y cigarrillos.
Cada uno de los anteriores tiene ventajas y desventajas. El ganado no se puede dividir en monedas pequeñas. La cerveza no mejora con la conservación, aunque el vino sí. El aceite de oliva proporciona una buena moneda líquida que es tan minuciosamente divisible como un deseo, pero es un poco complicado de manejar. Etcétera.
En el siglo XIX, el dinero mercantil se limitaba casi exclusivamente a metales como la plata y el oro. Estas formas de dinero tenían un valor intrínseco, lo que significa que tenían valor de uso en sí mismas. Debido a que el dinero tenía un valor intrínseco, no había necesidad de que el gobierno garantizara su valor, y el mercado a través de la oferta y la demanda de oro o plata regulaba la cantidad de dinero. Pero el dinero metálico tiene deficiencias porque se requieren recursos escasos para extraerlo del suelo; además, podría volverse abundante simplemente debido a descubrimientos accidentales de depósitos de mineral.