El impacto más inmediato de los aviones es el ruido, ya sea el estruendo regular de los aviones internacionales o el zumbido de ultraligeros y aviones ligeros en las tardes soleadas. El ruido de los aviones en el aire está relacionado con la velocidad del aire. Cualquier componente de movimiento rápido, como hélices y palas de compresor, genera ruido, al igual que los gases de escape de los chorros. Las aeronaves también son responsables de una proporción cada vez mayor de emisiones de contaminantes atmosféricos, tanto a nivel local como global.
Un avión se considera un vehículo, por lo que funciona de la misma manera que los automóviles y otros medios de transporte que funcionan con combustible. Sin embargo, la cantidad de contaminación que contribuye cada vehículo depende del tamaño del vehículo y de la distancia que debe recorrer. Cuanto mayor sea la distancia y mayor sea el tamaño, mayor será el volumen de contaminación.