Mariane
Hubo un cambio significativo en cómo se percibía a los artistas durante el período romántico. Anteriormente, el artista era visto como un hábil artesano, un poco como un herrero o un cestero.
Fue durante el período romántico cuando los artistas llegaron a ser entendidos como individualistas, una visión que todavía se mantiene en la actualidad. Se reconoció el sello del 'genio artístico'. Las obras de arte llegaron a ser celebradas por transmitir la idiosincrasia única de un artista en particular.
El poeta Byron personificó la idea del artista-genio, desafiante y original en su expresión. El pintor inglés Turner marcó un cambio en la forma en que se veían las pinturas. Sus pinturas sensuales y emotivas transmitían sus propios sentimientos en respuesta al paisaje. En contraste con obras anteriores más clásicas, las pinturas de Turner mostraron cómo se valoraba la interpretación única del artista.
La forma en que se producían las pinturas también había cambiado. En los estudios de Rubens y Rembrandt, todo un equipo de asistentes ayudó a crear un cuadro. Durante el período romántico, el énfasis en la identidad artística significaba que una obra de arte solía ser pintada por un solo artista. Esta idea todavía prevalece hoy.