Rhianna
Arquímedes, filósofo griego. En pocas palabras, el rey de la época le pidió a Arquímedes que averiguara si una corona hecha para él en realidad estaba hecha de oro o hierro. Dado que tienen una densidad diferente, tendrían un desplazamiento de agua diferente. Se da cuenta mientras se sienta en una tina llena de agua y notó que el agua se derramaba dependiendo de la masa y no del peso de un objeto.
Rupert
Arquímedes. Estaba en su bañera un día y se dio cuenta de que cuando se metía más profundamente en la bañera, se desplazaba más agua. Corrió afuera porque estaba muy feliz y gritó ¡¡¡EUREKA !!! Desnudo frente a todos. Así nació el desplazamiento de agua.