Me considero 'feliz, vaya afortunado', no porque sea irresponsable o falso, sino porque soy realmente capaz o comprometido mi camino por la vida sin preocupaciones: soy educado, ingenioso y autosuficiente. Por ejemplo, si el plan A no funciona, manténgase tranquilo, todavía hay muchas más letras en el alfabeto. ¡No te preocupes (o como yo diría) Hakuna Matata!