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Carnal se puede definir como todo lo relacionado con los apetitos corporales, especialmente los sexuales. Es un adjetivo. Por ejemplo, "unirse al sacerdocio es renunciar a todos los deseos carnales", o "Todos los pensamientos carnales emanan de las cualidades más bajas del hombre". Carnal también puede definirse como la antítesis del significado espiritual terrenal o mundano. Por ejemplo, "el universo carnal". Por último, carnal puede significar cualquier cosa que se relacione con la carne o el cuerpo.
La forma sustantiva de carnal es carnalidad. La carnalidad encuentra mucha mención en los discursos religiosos y es comúnmente condenada en las Sagradas Escrituras de varias religiones. Esto se debe a que se considera que la carnalidad es un obstáculo para obtener un estado de unidad con Dios o un mayor grado de espiritualidad. Los deseos carnales son los que hacen humano al hombre y así le impiden ascender al plano de mayor espiritualidad o cercanía al Todopoderoso. El conocimiento carnal es un eufemismo para la experiencia sexual.