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Ofcom, la Oficina de Comunicaciones del Reino Unido, es la autoridad reguladora establecida en diciembre de 2003 para supervisar el funcionamiento de las emisoras y los proveedores de telecomunicaciones y proteger a los consumidores. Sus deberes estatutarios se establecen en la Ley de Comunicaciones de 2003 y Ofcom describe sus responsabilidades como divididas en seis áreas principales. Estos son: garantizar el uso óptimo del espectro electromagnético, garantizar que una amplia gama de servicios de comunicaciones electrónicas, incluidos servicios de datos de alta velocidad, esté disponible en todo el Reino Unido, garantizar una amplia gama de servicios de radio y televisión de alta calidad y amplia apelación, manteniendo la pluralidad en la prestación de la radiodifusión, aplicando una protección adecuada a las audiencias contra material ofensivo o nocivo y aplicando una protección adecuada a las audiencias contra la injusticia o la vulneración de la intimidad.Ofcom responderá a las quejas de los consumidores relacionadas con estas áreas, además de colaborar con el gobierno y las empresas para garantizar que los nuevos desarrollos se ajusten a las regulaciones.