Fui a Europa con mi hija de 11 años durante un mes por nuestra cuenta. Había una bomba en una maleta en el aeropuerto de París y tuvieron que detonarla.
Una semana después de que me rompí la pierna, corrí hacia un edificio en llamas, con mis muletas, y saqué a 3 niños. Mientras salía cojeando del edificio, tropecé con una monja embarazada cuya fuente acababa de romperse. Di a luz al bebé y puse a la monja y al bebé en un autobús a Tuscon. Al día siguiente, el Papa me llamó y me invitó al Vaticano para una celebración de la entrega de las monjas.
Historia verdadera, lo juro, no mentiría, honestamente.
Salto en puenting, pero cuando tenía unos diez años una de mis hermanas trató de ahorcarse en el garaje, la levanté y le quité la cuerda de la rodilla.
No creo que sea exactamente valiente ... Pero cuando mi mamá murió cuando yo tenía 18 años, tuve que ir a la funeraria y hacer los arreglos para su funeral, ya que mi papá estaba demasiado molesto en ese momento. Seguro que fue la cosa más aterradora y triste que hice en mi vida.