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Después de la muerte y resurrección de Jesús; antes de la fiesta de Pentecostés, los apóstoles se reunieron con Pedro, a quien Jesús había designado como su líder. Pedro habló sobre la traición de Judas y su muerte. Pedro les dijo a los otros apóstoles que era hora de reemplazar a Judas. Pedro dijo que debían elegir a uno de los que conocían a Jesús y que estaba con ellos durante el tiempo que Jesús les enseñó. Pedro les recordó que debían elegir a otro apóstol para que los ayudara en la obra que Jesús les ordenó hacer.
Los Apóstoles eligieron, José llamó a Barsabás y Matías, luego oraron por la gracia de saber qué hombre Dios quería que fuera elegido. Después de orar, echaron suertes y la suerte recayó en Matías, quien se convirtió en el que reemplazó a Judas.
La historia de este evento se encuentra en los Hechos de los Apóstoles Capítulo 1, versículos 12-26.