La salivación excesiva, ptialismo, es normal en algunos animales. Algunas razas grandes babearán constantemente y no hay nada que se pueda hacer al respecto. Otros perros babearán excesivamente ante ciertos estímulos, por ejemplo, comida, excitación, calor. Sin embargo, cuando se trata de un cambio repentino en el perro, debe estar preocupado y buscar signos de algo grave.
Por lo general, el babeo excesivo es causado por trastornos estomacales, infecciones de las encías, enfermedades dentales, lesiones en la lengua, picaduras de insectos, úlceras en la boca, tumores, náuseas y ciertos trastornos metabólicos.
Sabrá que es algo serio si hay hinchazón anormal en los labios o la boca, mal olor de la boca, incapacidad para comer o beber, letargo, debilidad, vómitos, problemas para respirar.
Si nota alguno de estos, lleve al perro al veterinario, de lo contrario probablemente no sea nada.