Los teléfonos móviles emiten radiaciones mientras están encendidos, incluso si no están transmitiendo datos. La radiación de los teléfonos móviles es de muy baja intensidad pero su persistencia puede provocar numerosos problemas neurológicos. Puede causar cáncer de cerebro, dolores de cabeza, dolores de oído, visión borrosa, pérdida de memoria a corto plazo, entumecimiento, hormigueo y sensaciones de ardor, mal sueño, fatiga, ansiedad, etc. Para obtener más detalles, consulte el siguiente enlace:
Teléfono celular