Los discursos pueden variar en duración, estilo y tono dependiendo de su audiencia, pero al escribir un discurso sobre cualquier tema, se pueden tomar pasos simples para asegurarse de que esté bien preparado para dar un discurso.
Al dar un discurso sobre cualquier tema, el primer paso es asegurarse de que su audiencia comprenda el tema sobre el que está hablando. De esta manera, siempre es bueno comenzar su discurso con una definición del tema en cuestión. En este caso, la frase 'donde hay voluntad, hay una manera' puede definirse mejor como una determinación para tener éxito, sin importar los pasos que se deban tomar.
La frase se usa con mayor frecuencia para contrarrestar la sugerencia de que algo es imposible o demasiado difícil de completar. Este podría ser el segundo paso de tu discurso, para afirmar que, según la frase, nada es imposible mientras sigas teniendo la determinación de triunfar.
Para ayudar a su audiencia a comprender el tema, es útil dar un ejemplo de cómo se puede poner en práctica la teoría. Para la frase "donde hay voluntad, hay una manera", un buen ejemplo podría ser el aprendizaje de un idioma. Si a una persona le gustaría aprender francés, pero le resulta difícil y está pensando en dejarlo, entonces se puede pronunciar la frase 'donde hay voluntad, hay una manera' para ayudar a convencerla o incitarla a continuar en su búsqueda del idioma. Si tienen la determinación de aprender francés, eventualmente lo conseguirán.
- Idear una buena conclusión
Los discursos suelen resumirse mejor con una conclusión. ¿Está de acuerdo o en desacuerdo con la afirmación? ¿Por qué está de acuerdo o en desacuerdo con él? Las respuestas a estas preguntas proporcionarán un final estimulante para su discurso.