El conocimiento
juega un papel cada vez más vital en las organizaciones actuales. El proceso empresarial es multifacético
y dinámico, el trabajo físico está siendo reemplazado por un trabajo de conocimiento, requiere un alto
nivel de habilidades y capacidad. El conocimiento y la habilidad que son valiosos para la asociación
tienden a personificarse en individuos difíciles de reemplazar. Las relaciones entre
organizaciones en estos días son extremadamente complicadas, el mercado es mundial.
La velocidad de las transacciones en el sistema financiero dinámico requiere la capacidad de
interpretar y reaccionar ante los cambios en el entorno aproximadamente de inmediato. La organización intermedia está desapareciendo, dejando a los
niveles inferiores del sistema de gobierno con mayores responsabilidades. La cantidad
El conocimiento que se puede obtener sobre cualquier tema está aumentando a una altura que es
imposible de comprender en su totalidad. Encontrar y elegir el conocimiento que sea de mayor
valor para la asociación o el empleado individual parece una
tarea aproximadamente imposible. Las organizaciones son necesarias para aplicar nuevas tecnologías e
innovar oportunamente anticipando los cambios en el mercado y no como una respuesta
al declive comercial. Saber en qué momento, cómo y qué innovar
es, por tanto, una capacidad clave para las organizaciones.