Arturo
1. Asegurar la relevancia para el marco de referencia de un cliente
Sea plenamente consciente del “marco de referencia” de la marca para que una estrategia de reposicionamiento resuene entre los consumidores. Es esencial capturar no solo las necesidades emocionales y físicas del cliente, sino también la dinámica de la situación en la que ocurren esas necesidades. Reposicionar demasiado lejos de este marco de referencia crea confusión en el consumidor que puede hacer que un posicionamiento no sea exitoso.
2. Obtener el "permiso" del cliente para el posicionamiento.
Reconozca que el permiso equivale a una extensión lógica y razonable de la marca a los ojos del cliente. Tiene que ser creíble para reclamar cualquier terreno nuevo y necesita un “puente” que ayude a llevar a los clientes desde donde está hoy hasta donde quiere llevarlo en el futuro. A veces, puede aprovechar los beneficios emocionales únicos de la marca para proporcionar este "puente".
3. Cumpla con la nueva promesa de la marca
Ahora debe asegurarse de que el desempeño de la marca pueda cumplir con su nueva promesa. Esto puede ser más fácil de decir que de hacer. Cuatro pasos pueden ayudar en esto:
- Identificar ciertas "señales" de rendimiento o "botones calientes" que convencerán a los clientes del nuevo posicionamiento de la marca.
- Desarrollar programas de productos / servicios para garantizar un rendimiento constante en estas "señales".
- Realice un seguimiento y evalúe el rendimiento frente a las señales de los clientes mediante la investigación