Si está buscando escribir un discurso para una bienvenida en una iglesia, no necesita cantidades ridículas de consejos. Escribir un discurso es muy personal para la persona que lo escribe, por lo que el contenido real no debería ser realmente estricto. Lo único que debe tenerse en cuenta al escribir un discurso es utilizar diferentes técnicas que harán que su discurso de bienvenida sea mucho más memorable y entretenido de lo que sería sin él. A continuación se muestran algunos ejemplos de cómo puede hacer que su discurso sea personal pero constantemente interesante:
- ¡Usa el humor! De esta manera, puede involucrar a su audiencia y hacer que la gente escuche lo que está diciendo. Mire los eventos actuales en su área y alrededor del mundo e incorpórelos en una pequeña broma. Es mucho más probable que las personas se agraden contigo si utilizas el humor.
- Sea abierto y amistoso. Preséntese y cuéntele a la gente un poco sobre usted, especialmente si es un miembro regular de la iglesia. A las personas les gusta poder relacionarse con las personas con las que están escuchando y hablando. El hecho de que sea un discurso no significa que la gente todavía no pueda simpatizar contigo como persona a causa de él.
- Estar preparado. Asegúrate de saber exactamente de qué hablarás y escríbete pequeñas tarjetas de referencia para asegurarte de que los nervios no borren tu memoria y dejen tu mente en blanco. No hay nada peor que estar mal preparado y en el acto, especialmente si eres un orador nervioso en el mejor de los casos. Solo haz un poco de preparación y definitivamente valdrá la pena.
- Solo sé tu mismo. Dile a la gente tu amor por tu Dios y habla desde el corazón. Una iglesia es el mejor lugar para expresar exactamente por qué va a la iglesia y para deleitarse con su amor mutuo por la religión.