Hay varios problemas que deben abordarse aquí, el más importante de los cuales es que no debe sentirse presionado para tener relaciones sexuales cuando no lo desee.
Si bien el sexo es una parte vital de cualquier relación, una relación sexual unilateral ciertamente no te satisfará, ¡y evidentemente ni siquiera lo satisface a él!
Como ocurre con la mayoría de los problemas sexuales, lo mejor que puede hacer es hablar con su esposo con franqueza, pero con sensibilidad.
Sexo y alcohol¿El alcohol y el sexo se mezclan? El problema es uno con el que mucha gente lucha. La respuesta radica en cómo reacciona su esposo al alcohol. Es bien sabido que algunas personas se vuelven eufóricas y joviales después de unos tragos, mientras que otras se vuelven agresivas e incontrolables. Si controlar su temperamento es un problema para su esposo, entonces la cuestión de si debería o no beber pasa a primer plano.
Qué hacer con un marido borracho que exige sexo En cuanto a los efectos sexuales del alcohol en los hombres, las investigaciones sugieren que es un arma de doble filo.
Es probable que el consumo de alcohol reduzca las inhibiciones de su esposo, por lo que cualquier sentimiento de frustración o deseo sexual puede manifestarse después de que haya tomado una copa.
Por otro lado, estar borracho puede tener un impacto perjudicial en la fisiología del sexo (problemas para mantener una erección).
También puede hacer que sus avances sexuales sean descuidados y, por lo tanto, poco atractivos.
Cambiar la situación en la que se encuentra es vital para su relación.
Sugeriría los siguientes pasos:
- Trate de hablar con su esposo cuando esté sobrio, explíquele por qué lo que hace le incomoda. Intente explicarle los juegos previos (compre un libro si es necesario).
- Intenta iniciar el sexo en tus propios términos, cuando no esté borracho. Hágase cargo y muéstrele lo que quiere de un encuentro sexual.
- Sugiera hacer algo más que beber antes de tener relaciones sexuales. Quizás ver una película para adultos juntos o compartir un baño romántico podría ser un mejor juego previo que unas cuantas pintas de cerveza.
- Si ninguno de los anteriores parece un enfoque factible, entonces, desafortunadamente, puede ser el momento de volver a evaluar por qué estás en la relación en primer lugar.