Aunque todavía no he tenido el placer de jugar allí, voy a nominar a
Cape Kidnappers en Nueva Zelanda.
El mejor campo de golf del mundo
Si hay algo que el golf tiene que ningún otro deporte puede presumir, son los hermosos y extensos campos color esmeralda.
Un campo no se trata solo de los giros y vueltas, los búnkeres y los fantasmas ... Es un lugar al que hombres y mujeres de todo el mundo van para relajarse, socializar y descansar.
Un campo de golf es una parte integral del juego, un panorama vivo, que respira, en el que se desarrolla la acción. Navegar por un curso significa explorar sus rincones ocultos y evitar sus peligros como un atrevido Magallanes del siglo XIV que viaja a través de aguas desconocidas.
Todo esto explica por qué se presta tanto cuidado y consideración a la forma en que se diseñan y mantienen los cursos, y Cape Kidnappers encabeza la lista de la mayoría de la gente.
El campo fue diseñado por el estadounidense Tom Doak y, en lugar de dunas de arena, los golfistas tienen que lidiar con vertiginosos acantilados.
Las bolas fallidas tardan una eternidad en llegar al agua cuando caen por el acantilado, y disparar hacia el green final se ha descrito como "disparar hacia el fin del mundo".