Fausto
Una condición que afecta a los glóbulos rojos se conoce como anemia de células falciformes. Los pacientes que padecen esta enfermedad no tienen los glóbulos rojos con forma de disco normal, pero tienen una luna creciente conocida como células en forma de hoz. Estas personas tienen una forma diferente de hemoglobina que se conoce como hemoglobina falciforme (HbS). Esto es muy diferente de la hemoglobina (HbA) que se encuentra en los glóbulos rojos normales.
Ahora la pregunta es ¿cómo surge esta enfermedad? Esta enfermedad es el resultado de una mutación en el ADN del gen de una de las cadenas de hemoglobina. Esta mutación da como resultado una alternancia de un aminoácido en una de las cadenas de proteínas.
Cuando la hemoglobina falciforme cede su oxígeno a los tejidos, se adhiere para formar varillas largas dentro de los glóbulos rojos, lo que hace que las células se vuelvan rígidas y en forma de hoz. Esto puede causar un bloqueo en los vasos sanguíneos pequeños, como los capilares. Esto puede evitar que el oxígeno llegue a donde se necesita y puede provocar daños graves en un órgano importante.
La anemia de células falciformes es muy común en personas de África, el Caribe, el Mediterráneo oriental, Oriente Medio y Asia.