¡Que nunca te haré daño! ¡Y que realmente valoro la moral respetable y buena y realmente odio las malas palabras!
Si vienes a mi casa, tengo dos perros a los que les gusta hacer mucho ruido y saltar cuando llega la gente. Y cuando digo "arriba" me refiero a uno de los 3 pies despejados del suelo. Sin embargo, no se preocupe. Tengo una puerta para bebés que los mantiene alejados de la puerta principal para que pueda dejar entrar a la gente y saludar sin que me suban. Una vez que huelen tu mano y ven que te apruebo, se calman. A ellos les gusta mucho la compañía y se emocionan cuando llega.
Trate a mi hogar mejor que a su propio hogar. Te echaré si tienes una actitud desagradable.
No fumar, maldecir y es necesario que brille.
Ven a divertirte.
Que me gustan las discusiones, y libremente doy opiniones o pistas de discusión cuando dices algo que no entiendo pero que me gustaría, y daré mis propias ideas sobre las tuyas. ¡Si no quiere discutir, retrocederé con su simple declive de continuar la discusión!
Soy amigable y cálido y tengo sentimientos negativos sobre las personas que se quedan atrapadas en un ambiente muy seguro y evitan la comunicación, pero lo entiendo todo, pero si te molesta ser demasiado amigable, solo tienes que señalar tus líneas . Lo resolverá todo.
Sin embargo, soy amigable, pero no hablaré mucho y no involucraré mucho hasta que me sienta cómodo y establezca una confianza amistosa.
Si vienes a mi casa, soy demasiado sensible a que la gente no cruce sus límites, no cierre la apertura en ningún lado, no toque sin permiso. ¡Cuando me sienta cómodo lo expresaré! ¡Entonces puedes volar la casa!
Odio los celos, miento, esconder los verdaderos sentimientos (deshonestidad).
Como Gallo, me gustaría al menos un paquete de seis cuando me conozcas; no de cerveza sino de Mountain Dew y nos llevaremos como salchichas en pizza.
Está bien si no te agrado al principio, creceré contigo.
Si empezamos a salir, te alimentaré ... mucho. Así que es mejor que tengas un régimen de ejercicio.
Por favor, nunca comas el último trozo de chocolate sin preguntar primero. Podías ver un lado de mí que quizás desearías no tener. O si lo come, reemplácelo antes de que llegue a casa o me entere.