Estos puntos podrían ser hemorragias, en las que pequeños capilares se abren de golpe mientras transportan sangre a órganos y tejidos vitales, lo que eventualmente puede causar una pérdida masiva de sangre.
También pueden ser púrpuras, marcas similares a hematomas que no son causadas por una lesión, o petequias, que varían en tono y son versiones más pequeñas de purpuras. Estos puntos pueden ser causados por medicamentos como la aspirina, una infección que provoca la acumulación de toxinas en la sangre o los tejidos, un trastorno hemorrágico como la hemofilia o enfermedades que provocan la coagulación. Estas enfermedades incluyen lupus, cirrosis y algunos cánceres.
La desnutrición, como una deficiencia de vitaminas B12 o C o ácido fólico, también puede introducir tales manchas debajo de la piel. Es comprensible que el tratamiento médico para los hematomas anormales o las manchas de sangre se centre en prevenir o detener el sangrado, cambiar o ajustar un medicamento que pueda estar causando los hematomas o tratar el problema médico que los está causando.
Si la piel se lesiona por un hematoma, asegúrese de estar atento a los signos de una infección cutánea. Si nota algo alarmante acerca de los puntos y aparecen en todo el cuerpo y no en un lugar aislado, consulte a un médico que le aconsejará sobre el mejor curso de acción.