Una multitud de problemas pueden hacer que el ojo de un gato se vuelva rosado y se lagre en exceso. Estos pueden variar desde una pequeña lesión provocada en una pelea o un problema más grave con su mascota.
Si está muy preocupado por el estado del ojo de su gato, o si el estado del ojo se ha deteriorado enormemente en un corto período de tiempo, debe llevar a su animal a una práctica veterinaria.
Un veterinario podrá realizar un examen detallado y exhaustivo del ojo de su gato y debería poder comenzar a tratar el problema de inmediato.
El ojo de mi gato está rojo y lloroso, ¿qué podría estar causando esto?
- Infecciones respiratorias felinas: esta afección puede causar problemas en los ojos de un gato y podría provocar la aparición de una afección más grave.
- Conjuntivitis: también conocida como conjuntivitis, esta condición puede hacer que el ojo se ponga rosado y lagrimeo.
- Trastornos de la córnea: los problemas con los aspectos internos del ojo de su gato conducirán nuevamente a los síntomas mencionados anteriormente.