Alexandro
El carbono es la base de todas las moléculas orgánicas que componen el cuerpo animal. Es parte de las proteínas que forman el tejido muscular de los animales, así como de las enzimas que ejecutan todas las reacciones químicas que ocurren en el cuerpo.
El carbono también forma parte de los carbohidratos, que son una fuente importante de energía para el animal. Todos los carbohidratos se descomponen en glucosa, que también contiene carbono y que es el principal sustrato que se procesa para liberar energía.
Otra molécula importante que contiene carbono es el lípido. Los lípidos se utilizan para una variedad de propósitos en animales. Forman una capa debajo de la piel de un animal que ayuda a aislar su cuerpo para ayudarlo a sobrevivir a temperaturas extremadamente frías. Esto es especialmente importante para los animales que viven en hábitats muy fríos como los osos polares.
Es la grasa que forma la grasa de las ballenas y que proporciona flotabilidad a los peces.
Además, todas las hormonas en un animal también están basadas en carbono y ayudan a diferentes funciones como el crecimiento y el desarrollo, la reproducción y el comportamiento.
Por tanto, el carbono es la base de toda la vida. Es el elemento común en la mayoría de las estructuras que componen el cuerpo de un animal y también en la sustancia que ayuda a ejecutar y regular los procesos corporales. Y esa es, en resumen, la razón por la que el carbono es tan importante para los animales.