El sexo anal sin protección es esencialmente más peligroso en comparación con el coito vaginal porque el revestimiento del ano y el recto se rompe más fácilmente durante las relaciones sexuales que el revestimiento de la vagina.
¿Por qué el sexo anal es más peligroso que el sexo vaginal? Si bien la estimulación y la penetración del ano es una forma bastante común de participación sexual, existen varios factores que hacen que el sexo anal sea más riesgoso en términos de transmisión del VIH.
Los principales son:
- El riesgo de cortes o desgarros en el pasaje anal que permiten la entrada de líquidos infectados al torrente sanguíneo.
- La alta concentración de glóbulos blancos en la región del recto.
- La capacidad del recto para absorber líquido a través de sus delicadas membranas mucosas.
Los peligros del sexo anal y el VIH Por las razones mencionadas anteriormente, el sexo anal receptivo sin protección se considera la forma de actividad sexual más riesgosa en lo que respecta a la transmisión del VIH. Los riesgos del sexo anal sin protección podrían considerarse mayores en los casos en que la persona no infectada es la que está siendo penetrada.
En las últimas décadas, ha habido un aumento significativo en los casos notificados de VIH. En 1990, la proporción de la población infectada por el VIH era de 8 millones de personas, mientras que en 2010 se cree que la cifra alcanzó la marca de los 34 millones.
La propagación del VIH dentro de la comunidad gay a menudo se atribuye a la falta de conciencia sobre los riesgos del sexo anal sin protección. Si bien es cierto que los hombres homosexuales están más inclinados a practicar sexo anal, las investigaciones muestran que las parejas heterosexuales son más propensas a no usar condones cuando lo hacen.
Es importante tener en cuenta que el VIH se puede transmitir a través de fluidos infectados (sangre, semen o secreciones vaginales) que entran en contacto con el cuerpo de varias maneras (no solo a través del ano o el recto), que incluyen:
- A través de las membranas de la vagina y la uretra.
- Inyectando drogas
- El VIH puede transmitirse de madre a hijo a través de la lactancia y / o el trabajo de parto.
- Tatuajes, piercings y cualquier otra circunstancia en la que los fluidos infectados puedan entrar en contacto con el sistema sanguíneo.