Legalmente, creo que todo se reduce a lo estipulado en el contrato o arrendamiento que firmó.
Pero personalmente, parece un poco injusto evitar que pases tiempo con tu novio basándose en rumores.
Sin embargo, trate de entender las cosas desde su perspectiva: si está convencida de que su novio es un traficante de drogas, entonces puede estar perfectamente en su derecho de no quererlo en su propiedad.
Mi consejo sería intentar llegar a una solución amistosa. ¿No hay nada que puedas hacer para demostrarle que está equivocada de una manera sensata y educada?
Si no es así, tal vez sea hora de que empieces a buscar un lugar mejor (en tu propio tiempo, no te sientas presionado a irte).
Desea que su hogar sea un lugar relajante y cómodo para retirarse, no un lugar al que tenga que preocuparse por a quién puede y a quién no puede invitar. Además, un arrendador que vive en casa suena como una mala idea.
No importa lo amables que sean, muchos de ellos nunca aceptarán que usted sea más que un 'invitado' en su casa, a pesar de pagarles dinero por su propio espacio.