¿Dónde se originaron las Piñatas?

Las piñatas se originaron en ... ¡China!

O al menos esa es la teoría que encuentro más plausible.

Hay informes que se remontan a la China del siglo XIII, donde la gente llenaba muñecos de papel con semillas y luego los destrozaban en animadas fiestas. Los trozos de papel se recogieron y prendieron fuego, y las cenizas se guardaron como buena suerte.

¿Cómo llegó la Piñata a México?

Hizo varias paradas: primero en Italia, luego en España y finalmente en México.

El explorador italiano Marco Polo es el hombre al que podemos agradecer por traer la piñata a Europa.

Fue testigo de las celebraciones chinas y llevó la idea a las cortes renacentistas de Italia.

En lugar de muñecos de papel, usaron vasijas de barro. Y en lugar de semillas, la piñata estaba llena de joyas caras.

Los italianos también tenían una versión que usaban en las plazas públicas durante el Carnaval: la olla estaba llena de dulces, y los asistentes a la fiesta se turnaban para tratar de romper la piñata y soltar todas las golosinas que contenía.

La costumbre no cambió mucho entre Italia y España, y fueron los misioneros cristianos españoles los que llevaron el juego de la fiesta a México, ¡usándolo como una herramienta para convertir a la gente!

La razón por la que las piñatas se popularizaron tan bien en México fue porque ya tenían una tradición similar que se practicaba en honor a uno de sus dioses, y esa es posiblemente la razón por la que la tradición ha sobrevivido para convertirse en una marca registrada del Cinco de Mayo, así como en una de las favoritas de la fiesta de cumpleaños. .