No, la vida es demasiado corta. Tienes que elegir tus batallas. Ni siquiera vale la pena enfadarse. A veces es difícil recordar el cumpleaños de alguien por mucho que lo intentes.
La única persona que se acordó de mi cumpleaños fue mi esposa. Así que tiendo a recordar el cumpleaños de todos y cada uno con una nota o una tarjeta. Llegará al punto en que me detendré y veré si alguien se da cuenta.