Isaac
A nadie le sorprendió que, en el momento de la partición, la mayoría de los problemas a los que se enfrentaba Pakistán tuvieran algo que ver con la India.
El primer problema fue sobre la división de recursos. India tenía una ventaja obvia con la excusa de su "mayor tamaño". La suma prometida de 750 millones de dinero que debería haber llegado a Pakistán fue recortada por India y Pakistán sólo recibió una miserable suma de 200 millones. Fue solo debido a la huelga de hambre de Gandhi lo que obligó a Nehru a enviar 700 millones a Pakistán. Aún así, no se entregaron 50 millones, que era la parte que le correspondía a Pakistán. El mismo caso fue con la distribución de armas y municiones y otras cosas.
El segundo problema se refería al problema del agua del canal. Una vez más, India había bloqueado el suministro de agua a Pakistán y solo cumplió cuando las Naciones Unidas intervinieron para solucionar el problema.
El tercer y más importante problema era el de los refugiados que habían llegado al Pakistán desde la India, sin hogar y sin ningún apoyo monetario. Lo mismo sucedió con los hindúes y los sijs que habían emigrado a la India desde Pakistán.
El último y más crucial problema fue el del estado de Cachemira. En el momento de la partición, a todos los estados se les dio la libre elección de unirse a India o Pakistán. Sin embargo, el gobernante de Cachemira, que era hindú, no prestó atención al consentimiento mayoritario de los cachemires y, en cambio, se unió a la India. En cambio, el raja hindú Dogra de Cachemira comenzó a expulsar a los musulmanes de Cachemira del estado. Una fuerza de muyahidines decidió derrocar al gobernante hindú. De la noche a la mañana, Cachemira se adhirió a Inida en contra de los deseos de su gente. El ejército indio fue enviado inmediatamente en ayuda del gobernante de Cachemira. El asunto fue remitido a la ONU, que decidió en plebiscito. Sigue sin implementarse hasta la fecha.