Esta superstición parece hacer que mucha gente "toque madera" o "toque madera" cuando expresan algo bueno que esperan que suceda en el futuro sin saber realmente por qué. La idea general es no "tentar al destino".
Un posible origen de esta superstición se remonta a los paganos que creían que los árboles eran el hogar de los dioses. Si alguien quería ayuda o un favor, le diría su deseo a un árbol y luego tocaba la corteza. Este fue el primer "golpe" y volverían a tocar para dar las gracias. También hay algunas referencias cristianas que indican que tocar madera tiene que ver con la madera que representa la cruz o el rosario.
Otra explicación podría ser los juegos de persecución británicos que datan de principios del siglo XIX, en los que estarías a salvo de ser "etiquetado" si tocas la madera. "Tiggy-touch-wood" era un juego popular y podría explicar la transmisión de la frase "touch wood" al idioma cotidiano en el Reino Unido.