Libby
Los cálculos renales se forman a partir de minerales como el calcio que se disuelven en la orina. Beber mucha agua (aproximadamente 2 litros), que permite una correcta filtración de la orina por los riñones, es la mejor manera de evitar la formación de cálculos renales. Se sabe que la ingesta de jugos de frutas cítricas como la limonada y el jugo de naranja ayuda a prevenir la formación de cálculos renales.
Los alimentos que deben evitarse son el cacao, los tomates, las manzanas, las bayas, las espinacas, los cacahuetes y las bebidas como el té y el café, así como las bebidas alcohólicas. También se debe evitar una dieta alta en proteínas, especialmente una que enfatice la carne, ya que los subproductos ácidos generados durante la digestión conducen a la lixiviación de calcio de los huesos para equilibrar los ácidos creados.
Se sabe que medicamentos como las tiazidas y el citrato de potasio y magnesio inhiben la formación de cálculos renales y se prescriben para quienes tienen tendencia a los mismos. Según investigaciones recientes se ha observado que las personas con una ingesta baja de calcio especialmente el calcio obtenido de los productos lácteos son más susceptibles a la formación de cálculos renales.