Para mantener la salud de nuestros huesos, debemos obtener alimentos que contengan calcio. Este calcio ayudará a mantener los huesos fuertes.
La leche es buena para los niños. También come semillas de sésamo y nueces, en las que hay
una
gran cantidad de minerales para fortalecer nuestros huesos. Mi médico dice que el
ejercicio es el mejor remedio. Sin un ejercicio vigoroso,
los huesos no absorberán la energía y permanecerán frágiles.