Escribir una carta a un empleador y solicitar el despido voluntario debe hacerse con cuidado y profesionalidad. Después de todo, siempre existe la posibilidad de que se rechace la solicitud y que continúe trabajando para la empresa. Por lo tanto, lo que decida revelar en su carta debe pensarse de antemano y reconsiderarse antes de enviar o entregar la carta a su supervisor.
En general, estas cartas se envían porque una corporación está interesada en cambiar la estructura de su empresa; por lo general, los poderes públicos quieren un cambio de la vieja guardia y alientan a los empleados mayores a seguir adelante ofreciendo una serie de incentivos y beneficios financieros.
Cuando escriba su carta, deberá informarle a su jefe que está interesado en el despido voluntario; sin embargo, no es necesario que revele todos los detalles sobre su vida y sus planes futuros.
Simplemente configure una carta comercial formal en Word (esta popular aplicación de software tiene una plantilla de carta comercial) y comience la carta diciéndole a su jefe que le gustaría ser considerado para la redundancia voluntaria, ya que cree que califica para la función según su historial laboral, edad, etc. Eso es realmente todo lo que necesita decir.
- No seas demasiado personal
Si está buscando un despido voluntario porque su trabajo apesta, no revele este pequeño detalle de información. Si está buscando este servicio para poder pasar a otra carrera en la que esté más interesado, es posible que también desee mantener esto en privado. En general, esta carta debe ser breve y concisa: todo lo que se necesita es tres o cuatro párrafos que expliquen su experiencia laboral, historial y otros hechos que lo califiquen para el despido voluntario. Luego, imprima la carta y fírmela.
Mantenga sus deseos personales fuera de las cosas y no le dé a su jefe ninguna información privada que pueda usar en su contra más adelante. Sea profesional y recuerde que esta carta es solo una formalidad para que pueda postularse para el despido voluntario.