Alfredo
El Islam impone una estricta disciplina de buen comportamiento y conducta a sus seguidores. El mantenimiento de la dignidad y el respeto propio es una cualidad importante en un hombre. Se requiere en todos los aspectos y aspectos de la vida; sin él existe un sentimiento de inferioridad, nadie presta atención a lo que dice tal hombre ni respeta a un hombre que no sabe respetarse a sí mismo. El Islam espera que un hombre presente el ejemplo más alto de buena moralidad y buenos modales. Mientras los musulmanes mantuvieran una fe y una disciplina firmes, no perdieron el sentido del respeto por sí mismos.
El respeto por uno mismo es diferente de la vanidad. Es el nombre que se le da a la cualidad a través de la cual un hombre aprende a respetarse a sí mismo para no rebajarse a nada. Cuando un hombre que se respeta a sí mismo se encuentra con el mal, pasa intacto. Los malvados no tienen el valor suficiente para ni siquiera tocarlo. El comportamiento digno y bueno es la esencia de la moralidad, la fe y el respeto por uno mismo. La mendicidad está fuertemente condenada en el Islam, ya que es una negación del respeto por uno mismo. Incluso no se permite pedir ayuda en los asuntos diarios, hasta que sea necesario.